
Pier Paolo Pasolini
Del 5 de diciembre de 2023 al 7 de febrero de 2024
Nacido en Bolonia en marzo de 1922 y fallecido en circunstancias trágicas en la zona de playa de Ostia en noviembre de 1975, acercarnos a la figura de Pier Paolo Pasolini resulta una obligación. El poeta y cineasta no sólo nunca muere, a pesar de su asesinato, oscuro y obsceno, por el contrario conserva siempre su vigencia. Clarividente, personal, estajanovista e incómodo, su trayectoria refleja con espíritu crítico la evolución, inquietudes, tendencias y conversiones de la Italia del siglo XX, sublimando a través del cine una mirada de realismo poético e indiscutido humanismo.
Su estreno como director, Accatone (1961), es soberbio, de los debuts más impactantes y sublimes vistos en una pantalla. Pasolini, frente a otras figuras culturales e intelectuales del momento, conoce, vive, convive y siente al proletario, un hecho que prolonga con brillo en Mamma Roma (1962). Erigiendo una perspectiva de empatía sociopolítica y de cuestionamento constante de todo, pronto va a profundizar en el mito, a través de obras o figuras históricas, Jesucristo en El evangelio según San Mateo (1964) y sendas adaptaciones de Sofócles (Edipo Rey, 1967) y Eurípides (Medea, 1969), mientras sabe retratar una sociedad con trazos de singularísima parábola política en la excepcional Pajaritos y pajarracos (1966).
Dos series de filmes refuerzan su carácter inconformista y nada sujeto a modas o fáciles etiquetas. Una, más sórdida y polémica, analiza con contundente franqueza el poder y va de Teorema (1968) y Pocilga (1969) a Salò o los 120 días de Sodoma (1975), su testamento desacralizador, la película que decreta su ingreso absoluto en toda lista negra neofascista. La segunda serie, la Trilogía de la Vida, por medio de las traslaciones literarias El Decamerón (1971), Los cuentos de Canterbury (1972) y Las mil y una noches (1974) expresa como pocas una concepción gozosa, colectiva, libre y lúdica de la existencia al tiempo que indica un camino de reconocimiento de la narración popular, disgregada y coral y la propia revitalización de la tradición. Por miles de razones tan válidas como estas, Pasolini sobrevivirá siempre.

Pajaritos y pajarracos

El evangelio según San Mateo

Accatone

Medea

Mamma Roma

Edipo, el hijo de la fortuna

Teorema

El Decamerón

Pocilga

Los cuentos de Canterbury

Las mil y una noches
