Esenciales: Ida Lupino
Del 6 de octubre de 2020 al 15 de octubre de 2020
Más conocida como actriz, Ida Lupino (1918-1995) tuvo también una breve pero intensa carrera como directora, la única directora que trabajó para los estudios de Hollywood en los años 50 (y la segunda, después de Dorothy Arzner, en ser admitida en el sindicato americano de directores, DGA). Su popularidad como actriz está ligada a dos películas que filma de forma consecutiva para Raoul Walsh formando pareja con Humphrey Bogart, Pasión ciega (They Drive by Night, 1940) y El último refugio (High Sierra, 1941). Con fama de problemática por ser muy selectiva en la elección de sus trabajos, Lupino desarrolló una carrera de gran personalidad con directores como Michael Curtiz, Nicholas Ray, Don Siegel, Robert Aldrich, Fritz Lang o Sam Peckinpah, antes de centrarse en la televisión. Prueba de esta singularidad es su salto a la producción y después a la dirección. La productora que forma con su marido se llamará inequívocamente The Filmakers (con una sola m). Ese paso a la dirección es accidental, cuando enferma Elmer Clifton, el director de una de sus producciones, Not Wanted (1949) y ella tiene que ponerse detrás de la cámara, aunque no aparecerá como tal en los créditos. Pero la temática social de esta película, coescrita también por Lupino, definirá el género en el que se encuadran sus posteriores realizaciones, de marcado carácter psicológico: Never Fear (1950), Outrage (1950) o la más conocida, El bígamo (The Bigamist, 1953). Sin embargo, su película más conocida será El autoestopista (The Hitch-hiker, 1953), un muestra de cine negro protagonizada por Edmond O’Brien, un género hasta ese momento vedado a las mujeres. A partir de entonces, aunque dirigirá algún que otro ocasional largometraje, su carrera se centrará en la televisión, medio para el cual realizará distintos episodios de series tan conocidas como Alfred Hitchcock presenta, Los intocables, El fugitivo o The Twilight Zone. Este pequeño ciclo que le dedica el CGAI-Filmoteca de Galicia se centra en su trabajo como directora con las películas Not Wanted, Never Fear, El bígamo y El autoestopista, además de La casa de las sombras (On Dangerous Ground, 1951), película que coprotagonizó junto a Robert Ryan para Nicholas Ray, a quien también sustituyó como director cuando él enfermó. Como era costumbre en Hollywood, este tipo de reemplazos nunca están acreditados.