La femme de nulle part

El guion de La femme de nulle part parte de una serie de ocho crónicas atribuidas a Ève Francis y publicadas en Film en 1917 y 1918. El filme lo produjo en 1921 Félix Juven, propietario y editor de un periódico. El rodaje tuvo lugar en los Studios des Buttes-Chaumont, en la Provenza y en una mansión en los alrededores de Gênes. El rol principal estaba inicialmente previsto para Eleonora Duse pero como su estado de salud no le permitía actuar, fue sustituida por Ève Francis. La actriz adopta el conmovedor papel de La Duse para encarnar este personaje lúgubre y devastado, obsesionado por los demonios del pasado y sujeto a múltiples visiones. El uso limitado de los intertítulos se equilibra con las actitudes: sombría e inquieta en el marido (Roger Karl), pensativa y atormentada en las dos mujeres. La morada aislada, vacía y austera está cargada de simbolismo. La naturaleza rigurosa y los elementos climáticos destacan un sentimiento de inclemencia. El clima sustituye a los discursos. Delluc considera La femme de nulle part su filme mejor acabado: “Esta confrontación del presente y del pasado, de la realidad y del recuerdo a través de la imagen, es una de las tramas más seductoras del arte fotogénico. [...] Cada uno tiene algo en él o una historia que cree muerta y que los fantasmas de la pantalla no tardan en reanimar”.

El filme se estrenó el 8 de septiembre de 1922. Si el éxito de público no le acompaña, la crítica es al menos elogiosa.